El liderazgo como concepto clave del management tiene múltiples definiciones, pero esencialmente puede entenderse como la capacidad de un individuo de influir en un grupo de personas e impulsarlas. Un aspecto importante que está relacionado con el desempeño del liderazgo es la innovación. Steve Jobs, el fundador de Apple y uno de los emprendedores más famosos, aseguraba que la "innovación distingue a un líder de un seguidor".

Para las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) es fundamental entender cómo crear un buen líder, más aún cuando éste es el mismo dueño. Justamente, la gran diferencia respecto de su par de las grandes ligas es que, en la mayoría de los casos, es el mismo dueño quien encabeza todos los cambios.

Ser el dueño o administrador de una compañía no te convierte en líder. “Un gerente se basa en el control mientras que un líder inspira confianza”, señala Warren Bennis, uno de los llamados "gurús" del liderazgo en Estados Unidos. Una gran parte de la literatura pone la lupa en el “factor humano” como el principal aspecto para influir, de manera que aquellos que mueven la empresa se conviertan en la principal ventaja competitiva.

Las PYMEs por naturaleza son más estáticas y no están acostumbradas a los cambios fuertes. Por eso, es importante que, en una primera etapa, el líder trabaje de forma muy cercana con su equipo, preguntando a sus empleados cómo creen ellos que deben hacerse las cosas. Para tener un liderazgo más efectivo hay que tratar de dar espacios para la creatividad de la gente, devolverles las responsabilidades y que solucionen sus problemas, para que así se den cuenta lo que es llevar las riendas de un proyecto o equipo.

Qué dicen las investigaciones

Una encuesta global realizada por la consultora McKinsey&Company encontró que, entre las habilidades necesarias para el éxito de las organizaciones, se encuentra que los líderes fomenten la toma de decisiones participativas ya que ellos no siempre tienen toda la información para decidir. Involucrar a otros en el proceso de toma de decisiones permite al ejecutivo aprovechar los talentos individuales.

Un estudio de la Universidad de Illinois sostiene la idea de que los líderes no necesariamente nacen sino que se construyen. Lo demostraron dándole clases de liderazgo a varios jóvenes durante semanas y encontraron que sus habilidades se habían incrementado notablemente. En este sentido, además de las habilidades personales que el dueño de un negocio necesitará para encabezar una empresa, es necesario que tome consciencia de que si la compañía tiene una ventaja competitiva real, la tiene que hacer sobresalir para atraer consumidores en el mercado.

Actualmente los líderes de las PYMEs se ven obligados, para poder competir con las grandes empresas, a idear nuevas estrategias destinadas a generar mejoras en el servicio al cliente, en la innovación del marketing, en la calidad de respuesta, del trabajo en equipo, en la velocidad de acción, y últimamente en su relación más cercana con las redes sociales.

Hoy es requisito indispensable ser muy rápido, muy flexible, muy innovador, muy barato y hasta muy perfecto. El líder, en un entorno así, tiene que enfocarse, primeramente, en mejorar su relación con sus colaboradores, el mercado y su medio ambiente, si desea lograr el compromiso real por parte de ellos para perdurar en el mercado y en el tiempo como empresa.

La agilidad asoma como cualidad clave para las empresas actuales. Los líderes efectivos desarrollan una visión del futuro, crean y venden la estrategia y persuaden a los demás en la organización sobre la forma de trabajar. No sólo se trata de control. El líder es capaz de administrar información y conocimiento más efectivamente por medio de influenciar a los empleados en función del logro de metas de productividad y calidad.

A pesar de que actualmente las técnicas para entender el liderazgo y la cultura organizacional crecen a pasos agigantados, a las PYMEs les queda aún mucho camino por recorrer. En general, les falta capacitación y tienden aún a confundirlo con el concepto de autoridad. Es por eso que el desarrollo de liderazgo se convierte en una oportunidad de crecimiento y fortalecimiento de este tipo de compañías.