Este es el primer segmento de una serie de artículos que servirá de guía para los empresarios que quieran delinear y realizar una estrategia corporativa, implementando procedimientos financieros que cumplan con la meta de maximizar la riqueza a largo plazo. Presentaremos los procesos de gestión que se deben llevar a cabo durante la aplicación de la estrategia financiera y, además, se detallarán las funciones principales de la gestión financiera y los métodos operativos que van con ellos.
Empezando desde la punta de la pirámide, lo primero que una empresa debe definir para implementar un esquema financiero exitoso es la estrategia corporativa. La misma debe ser un proyecto general, a largo plazo, con un plan de acción compuesto por un portafolio de estrategias de gestión (finanzas, marketing, etc.), en función de cumplir con el objetivo especificado.
La estrategia financiera es el siguiente elemento de importancia en la implementación del plan. Es uno de los componentes de la cartera de la estrategia corporativa. Abarca las decisiones de financiación necesarias para alcanzar el objetivo general, especificado el nivel óptimo de inversión y financiación. Además, es la pieza de la política de gestión empresarial que determina las decisiones de inversión y financieras, condiciones necesarias para lograr la maximización del beneficio a los accionistas.
Cada tipo de decisión se puede subdividir en dos categorías generales. Aquellas que son más a largo plazo, consideradas decisiones estratégicas o tácticas; y las que son a corto plazo, conocidas como decisiones operativas.
Seguir