Exportar genera el doble de probabilidades de éxito que operar únicamente en el mercado doméstico, según un estudio realizado por IHS Global Insight y DHL Express. Conoce los principales motivos para intentarlo y comenzar a armar tu plan de exportación:

Las empresas alimenticias deben realizar inteligencia de mercado en los países a los que quieran exportar

• Crecimiento: adquirir mayor tamaño es una consecuencia natural de la internacionalización. El aumento en la demanda lleva a incrementar la producción y las ventas.
• Diversificación del riesgo: la globalización impulsa una creciente demanda de productos. Si por alguna razón el mercado local se contrae, las empresas internacionalizadas se verán menos afectadas. Al exportar, las compañías aumentan el número de clientes por lo que una reducción de sus pedidos no impactaría su rentabilidad.
• Economías de escala: una demanda mayor puede permitir a las empresas aumentar su producción y, de este modo, hacerlas más rentables. Si se genera un excedente, tienen la posibilidad de colocarlo en el exterior más allá de la estacionalidad y otros factores que condicionen lo local.
• Innovaciones: al competir a nivel internacional, las empresas deben adaptarse a las más modernas tecnologías y certificaciones, factores que les permitirán crecer y ubicarse a la vanguardia también en el mercado local.
• Beneficios fiscales: al internacionalizarse, es posible que las empresas puedan reducir la proporción de impuestos que pagan.
• Nuevas capacidades: para poder crecer y exportar, las compañías deben mejorar sus propias herramientas para competir; por ejemplo, capacitando a su personal. Esto les permitirá, adaptar la producción en función de la demanda existente.
• Imagen: el acceso al mercado internacional puede elevar el prestigio de las empresas en el mercado interno.

Mira los consejos que brinda MVD Consulting, de Uruguay:

4 consejos para alimentos

Quínoa, productos orgánicos, stevia y la chía de América Latina y el Caribe pueden encontrar excelentes oportunidades mediante el acceso a mercados internacionales. Así se desprende de una investigación de la Universidad de Duke para El Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN), perteneciente al Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Los pequeños y medianos productores de la región deben tener en cuenta estos consejos:

• Seguir normas sanitarias: los alimentos están sujetos a una serie de normas sanitarias y fitosanitarias para garantizar su seguridad y calidad, y prevenir la transmisión de enfermedades. Por eso, estos alimentos tienen un valor considerablemente más alto que pueden representar una atractiva fuente de ingreso para los pequeños productores.
• Realizar inteligencia de mercado: antes de exportar es muy importante que las empresas alimenticias estudien los gustos y las costumbres de los países donde consideran vender sus productos. Pueden comenzar por indagaciones sencillas como buscar reseñas en sitios web de restaurantes y páginas de supermercados para ver si hay productos similares.
• Participar en ferias: para contactarse con posibles distribuidores y compradores es clave asistir a ferias comerciales, que son una buena oportunidad para ponerse en contacto con potenciales clientes, distribuidores y proveedores. Una de ellas es LAC FLAVORS, que se realizará en septiembre de 2015.
• Contactarse con cámaras y agencias de promoción: las representaciones oficiales de cada país pueden ayudar al proceso exportador. También los asesores en logística y exportación tienen información muy valiosa y agilizan los procesos internacionales.

Escucha la experiencia de Rachel Olortegui, de Ecoinca, Perú: